dimarts, de juliol 26, 2016

Miguel Hernández

Recordar a Miguel Hernández que desapareció en la oscuridad y recordarlo a plena luz, es un deber, un deber de amor. Pocos poetas tan generosos y luminosos como el muchachón de Orihuela cuya estatua se levantará algún día entre los azahares de su dormida tierra. No tenía Miguel la luz cenital del Sur como los poetas rectilíneos de Andalucía sino una luz de tierra, de mañana pedregosa, luz espesa de panal despertando. Con esta materia dura como el oro, viva como la sangre, trazó su poesía duradera. ¡Y éste fue el hombre que aquel momento de España desterró a la sombra! ¡Nos toca ahora y siempre sacarlo de su cárcel mortal, iluminarlo con su valentía y su martirio, enseñarlo como ejemplo de corazón purísimo! ¡Darle la luz! ¡Dársela a golpes de recuerdo, a paletadas de claridad que lo revelen, arcángel de una gloria terrestre que cayó en la noche armado con la espada de la luz!
Pablo Neruda


Libro de artista de C. Sansoto

2 comentaris:

... i escaig ha dit...

'a golpes de recuerdo' - m'agrada aquesta idea

i el llibre d'autor 'El último rincón', i la teva companyia poètica
Cornèlia etèria, una abraçada
.

Sanzsoto ha dit...

Me fascina este poeta, de lo que pudo ser y no fue y aun así sus poemas siguen reflejando la mas cruda realidad del momento actual. Los años parecen no pasar por ellos.